La madre de Ariana Grande refugió a un grupo de fans en los camerinos tras el atentado

El mundo de la música sigue conmocionado por la tragedia vivida en Manchester el pasado fin de semana. Un artefacto explosivo segó la vida de 22 personas al finalizar un concierto de Ariana Grande en el Manchester Arena, dejando además decenas de heridos, la mayoría de ellos jóvenes menores de edad. El atentado ha sido reivindicado por DAESH. 

El gesto de la madre de Ariana Grande

Lo que no supimos hasta horas después de producirse la catástrofe fue el papel que la madre de Ariana Grande jugó en esos minutos de tensión e incertidumbre. La mujer no dudó en conducir a un amplio grupo de fans, que corrían despavoridos alejándose del lugar de los hechos, hacia los camerinos de la artista tras el escenario.

Joan Grande, así se llma la mujer, se encontraba en primera fila siguiendo la actuación de su hija, y en cuanto vio lo sucedido no dudó ni un minuto en avisar a los jóvenes que le rodeaban para intentar ponerlos a salvo. Allí, en el lugar más seguro que pudieron encontrar, esperaron a que la seguridad del recinto les diese su aprobación para marcharse a casa. 

Angustia en los camerinos

Fueron minutos de angustia. Así lo ha revelado Aaron Spears, el batería de Ariana Grande, que vivió junto a la artista los difíciles momentos: "nos estábamos retirando a camerinos tras la actuación y escuchamos la explosión, los gritos, todo eso...no sabíamos qué estaba pasando, todo era especulación. Allí esperamoshasta que la seguridad nos dijo que debíamos evacuar el recinto inmediatamente". 

No fue hasta más tarde cuando les confirmaron que se trató de una bomba, y de las terribles consecuencias que trajo consigo. "Es desgarrador, que tantos chicos jóvenes que asistían al concierto de Ariana Grande...este recuerdo convivirá con nosotros para siempre".